“Este monje lleva tacones”: el monje budista que combate la homofobia con maquillaje
Tokio.- El japones Kodo Nishimura, monje budista, maquillador profesional y modelo, se ha convertido en un referente del activismo LGTBQ+ en Japon, desde donde predica un mensaje a favor de la inclusion y la diversidad a traves de sus dos pasiones.
“Creo que mi mision en la vida es liberar a gente de sus valores limitadores y mis herramientas son el budismo y el maquillaje”, dice Nishimura en una entrevista con Efe en plena promocion de su libro “This Monk Wears Heels: Be Who You Are” (Este monje lleva tacones: Se tu mismo), publicado este año y que se lanzara en cinco idiomas mas en los proximos meses, incluidos el español y el frances.
El volumen, autobiografico, es una adaptacion mas extensa de su primer libro en japones, “Seisei Dodo” (2020), donde habla de la rama del budismo que profesa, la escuela de la Tierra Pura, y como sus enseñanzas le ayudaron a estar en paz consigo mismo, su sexualidad y a desarrollar su activismo por los derechos LGTBQ+.
Danne Aro Belmont es una sobreviviente de las denominadas terapias de conversion, una practica en donde se intenta alterar la orientacion sexual de personas por medio de rituales y hasta exorcismos.
La relacion de este monje de 33 años con el budismo no siempre fue idilica. Consciente de su homosexualidad desde edad temprana, Nishimura lidio con una infancia dificil dentro de la conservadora sociedad japonesa.
Contrariado por la perversion con la que se representaba al colectivo y su propia inseguridad, le dio la espalda al budismo y al templo de mas de 500 años al cuidado de su familia y con 18 años se traslado a Nueva York (Estados Unidos).
“Se esperaba de mi que fuera un chico y que heredara la imagen tradicional de un monje budista, y senti que mi vida estaba siendo limitada y que no era libre”, explica sobre su decision de mudarse a la Gran Manzana, donde quedo fascinado por las “drag queen” y los hombres inmersos en el negocio de la cosmetica.
Empezo a comprar su propio maquillaje y una espontanea anecdota maquillando a una amiga para que se sintiera mejor cuando atravesaba un momento dificil desperto su interes profesional por la industria, en la que lleva diez años y con la que ha pasado por las bambalinas de la Semana de la Moda neoyorquina, Miss Universo o participado en el show de Netflix “Queer Eye: We’re in Japan!”.
Entre las personas a las que ha maquillado estan la actriz Halle Bailey, que encarna a Ariel en la nueva produccion de “La Sirenita” de Disney, pendiente de estreno; o a la modelo española Ángela Ponce, la primera candidata transexual a Miss Universo, en la que vio materializado su sueño de niñez de participar en el certamen.
Si hubiera tenido la oportunidad, dice, habria querido maquillar a La Veneno. “Ella representa la evolucion de la libertad”, señala.
Nishimura, que habla español con soltura, mantiene un vinculo especial con España. Un viaje a Barcelona fue el detonante de la reconciliacion con su sexualidad. Alli conocio a Sergio Garcia, “el primer amigo al que pude mostrarle mi sexualidad sin miedo”, cuenta.
“Alli aprendi que los padres pueden apoyar y aceptar nuestras sexualidades”, relata recordando con cariño el bocadillo que la madre de Sergio les preparo cuando iba a salir a su primer bar de ambiente y que le resulto liberador. “Tenia la esperanza de que en Japon quiza mi mama y mi papa fueran a entenderme y apoyarme”. Y asi fue.
En Japon, donde, pese a ciertos avances, el matrimonio homosexual sigue siendo ilegal, no es frecuente oir insultos por la calle, pero al igual que hay menos violencia tambien hay menos activismo.
“La gente calla porque no queremos que se burlen de nosotros. Segun las estadisticas, el 80 % de las personas LGTBQ no pueden salir del armario en sus lugares de trabajo, lo cual es triste, porque significa que se esconden”, lamenta Nishimura.
¿Por que decidio entonces volver a Japon hace ya cuatro años?
“Ahora me encuentro en Japon porque siento que tengo la suficiente confianza en mi mismo como para cambiar la percepcion de la gente sobre el colectivo LGTBQ. Cuando estudiaba budismo aprendi una leccion: ‘Si tu mismo no crees en Buda, ¿como esperas que otros crean en Buda?’. Es lo mismo con los derechos LGTBQ”, explica.
La homosexualidad sigue estando penada en mas de 70 paises, en la mayoria de los casos por motivos religiosos. Desde su posicion como parte de un culto y del colectivo LGTBQ, Nishimura predica sobre una sociedad plural y respetuosa.
“Es triste que haya gente que no entienda la diversidad, pero al mismo tiempo nosotros tenemos que ser los que inspiren a la gente a ser libres”, dice desde el tocador de su casa mientras se retoca el brillo de labios y la sombra de ojos.
Entre los proyectos en los que ha participado esta la creacion de “Kodo: el Liberador”, una historieta a cargo del tandem español de ilustradoras Studio Kosen (Aurora Garcia y Diana Fernandez), con la ayuda del tambien dibujante hispano-japones Ken Niimura, que tiene como personaje principal a un monje homosexual que ayuda a frenar el acoso y a fomentar el respecto por todas la orientaciones sexuales.
“Queria mostrarle a la gente que nosotros tambien podemos ser el protagonista” de la historia, explica orgulloso.